martes, 8 de septiembre de 2015

Hombres muertos que caminan (5)

el suicidio_
El suicidio es una conducta, no una enfermedad.

Lo sentía.
En demasiadas ocasiones.
Lo más intenso, lo perpetuo, dentro. El deseo de morir.

No lograba definirlo del todo. Hoy, propósito firme. Mañana, propósito y punto. Siempre, esa idea en mi cabeza.
Ni me lo planteaba como algo obsesivo, era una etapa remediable, unas ganas, un algo común a todos, una intranscendencia. Un nubarrón.
Error.
En cuanto me tiraba el rollo autodestructivo, se hacía el silencio, se tensaban como arcos, bromeaban con mi tara y cambiaban de tema y de local.

Conclusión:
Sólo es concebible que uno que esté loco de remate, se mate.

Así que me adentré en una nueva fase, barrenando sobre mi psicosis. Hasta pasé consulta, pero nada. Resultó que no era, ni mucho menos, la patata podrida de la pila.

Normal y corriente, como vosotros.

4 comentarios:

  1. ah! y no he dicho que me gusta mucho este título.

    ResponderEliminar
  2. A mí tb. Sale de un documental sobre la pena de muerte que vi hace una porrillada de años. Tap, tap. Gracias por comentar Sil.
    Y tengo que ponerme con la Beauvoirrrrrrrrrrrrr. Méteme un poco de caña!!

    ResponderEliminar